Además de mi poca habilidad con el acrílico tuve la suerte de que una compañera me tirara el bote de pintura roja sobre el libro que me servía de modelo, salpicó mi cuadro y manchó el piso. Me quedé con medio bote de acrílico, con la deuda del libro que habrá que reponer y con la pérdida de tiempo que debía dedicar a 'terminar' el cuadro y en su lugar tuve que limpiar el desmadre rojo. Quien me conoce sabe (o debería saber) que ante esta situación mandé todo a la chingada, recogí mis cosas y di por terminada la pintura.
Esta foto borrosa la tomé en el taller mientras intentaba aclarar el rostro de mi pintura
Una foto más cerca pero con la luz amarillenta del foco

Una foto más cerca pero con la luz amarillenta del foco

Trataré de arreglarlo, si no logro hacer nada por él, lo cubro con vinílica blanca y reciclo la tela.
Mañana (hoy) martes café literario de una sesión sobre Nadie me verá llorar de Cristina Rivera Garza y el viernes reunión familiar: ''Gracias por venir a mi fiesta de jubilación'' jajajajaja chiste local, familiar en realidad...
2 comentarios:
, Creo que lo de "nadie me verá llorar " se canceló pues a mi me hablarón para cancelar. es una pregunta tonta pero: ¿vio con ojos de odio a quien derramo la pintura?
Veo que solo estas usando tres tonos. Yo intentaria que dejes una capa blanca muy delgada sobre la cara, durante un buen rato hasta que seque. E intentar again.
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