Se acabó junio, se acabó todo. Dramática sí. Bien entonces diré: se acabó junio, se acabó la mitad del año y se acabó la pensión alimenticia. Esta borracha debe emplearse en algo, cumplir su horario de oficina en un trabajo deprimente para satisfacer las expectativas de la familia. Por que si no trabajas, te casas, tienes hijitos, eres creyente y cuidas de tus hijos, no eres una López. jajaja exagero.
Pero sí necesito trabajo, no tengo nada que ofrecer a quien me contrate, pero sí tengo muchas peticiones: horario flexible, de preferencia vespertino-nocturno, múltiples breaks para fumar y salidas temprano los fines para irme a embriagar a alguna cantina de mala muerte. Ya ni siquiera puedo decir a mi favor que medio redacto bien, porque últimamente ni eso. Mucho menos que pasé un tiempo considerable en la facultad de filosofía y letras, porque no es garantía de nada. Si acaso me rentaré con fotógrafa de bodas (con lo que amo estos rituales mamones), quince años y bautizos. Futura cajera en algún Carl's Jr, pero que me ayuden a contar, porque eso no se me da. Saca copias, sirve cafés, vendedora de avon?
Total, nada de esto me interesa, pero es una de esas cosas que tienes que hacer, no?
no? (leer en tono desesperado)
No hay comentarios:
Publicar un comentario