14 de noviembre de 2010

Coleccionando absurdos



Mis fines de semana son la representación material del tedio. Larguísimas y densas horas de hacer todo y nada. Atmósferas plomizas que se repiten hasta el infinito.

Imaginarte feliz  no ayuda. Patrañas eso de que si amas al otro, no te importa que esté con alguien más, mientras sea por su bien.  Eso o que soy inmadura y conmigo no aplica.
Ser visceral no es sencillo. Pasar tu tarde junto a la lavadora pensando en que tú debes andar por ahí, con ella. Terrible.

Lo único que me consuela es que el sábado ya se acabó, mañana veré qué hacer conmigo.