Los que se fueron

Ha sido lento pero creo que he logrado quedarme sola. Verás, no es una historia triste que venga a contar en busca de lástima o por autocompasión. Simplemente es un recuento de lo que más temía y sucedió.

Alguna vez Mich me dijo, cuando me escribía, que odiaba que la dejaran sola cuando no quería estarlo. Creo que le contesté que eso también me asustaba a mí. Luego, en mis largas horas [días, meses, años] de ocio me di cuenta que poco a poco provoqué eso a lo que tanto le temía: Me he quedado sola.  Aún a mi hermano, que era de los pocos que se mantenían, lo alejé. Y no es falta de amor, no. Porque lo quiero, a él y a la mayoría de los que se fueron. Pero algo malo debe haber en mi cabeza que me llevó a dónde estoy.  Y ahora, haciendo un recuento veo que sí: estamos solas. [yo y todas las de mi cabeza].

Perdidos en batalla: Maggi [ cómo la marca], Dámaris, Liset, Ana Luisa, Edgar, Daniel, Ricardo!, Mayela, Argelia, Maricruz, Neri, Luis, Alexo, ¡Lynda!, Arminda, Karina, El pollo!, Jorge, Limhi, Christian, Rubén, Marina, Celia, Mich, Griselda, Consuelo, Rolando, Liset, Lilianita, ¡Armando!, Román, Paola, Lorena, Elisa, Liliana, Consuelo, Claudio, Gaby, usted. [más los que se acumulen].

Al menos son de los que me acuerdo y dejo el último espacio para que se acomode el que guste. Porque, seamos sinceros, los que están ahora conmigo tampoco se van a quedar. Ay Wilson , tienes poderes premonitorios, el pre loca que me escribiste se está cumpliendo y qué miedo.