30 de mayo de 2011

...

Ya no estamos a salvo ni por las madrugadas para conectarse anónimamente a msn. Lo digo porque ayer tuve un visitante inesperado en la ventana de conversación. Apareció diciendo ''Hola'', un simple hola que tiempo atrás hubiera desatado mil emociones encontradas y ayer lo único que provocó fue un monólogo mental de tres segundos: ¿hola? ¿en serio? ¿sólo eso se te ocurre decir después de todo? ¿después de nada? ¿acaso nos vimos ayer y el saludarme es la cosa más común del mundo? acto seguido me desconecté.  
Por eso es mejor quedarse en la comodidad del anonimato y así no correr el riesgo de revivir dramas cáducos. Caer en lugares conocidos y ya muy recorridos, no.